Pinturas de Santos para curar heridas
Los restauradores son personas que trabajan arreglando esculturas religiosas , pero no solo son conocidos por eso. En los últimos años muchas personas llegan hasta sus pequeños locales en busca del conocido encarne que sirva para curar algún raspón, herida o lastimado.
Las personas encargadas de curar cualquier lastimado son quienes llevan por oficio el reconstruir figuras de santos, que son destruidas por el paso del tiempo o por un accidente. A sus negocios llegan cientos de figuras de Santos, vírgenes y el consentido Niño Dios.
La mayoría de los restauradores están ubicados en las calles del Centro Histórico conocen de este negocio por
décadas, ya que muchos aprendieron el oficio de sus padres o heredaron
el negocio de sus familias. Ellos curan heridas en personas con la misma pintura que emplean para retocar a los santos.
Restocadores de heridas
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| Madre de Soledad Espinosa retoca la herida de un cliente con un pincel. |
Tiene un taller de 18 años, ubicado en las calles Rocafuerte y García Moreno. Ella cura heridas con el material de restauración que lleva pintura, carbonato y algunas cosas que no puede mencionar.
El proceso consiste en compran el producto que mezcla con el color de la piel de su cliente, lo mismo se hace con las figuras.
Soledad supone que el encarne cura heridas porque seca y cubre del sol. El resultado del encarne aplicado en la piel depende de la constancia y no se puede aplicar en heridas cocidas, ni heridas de cirugía, por que solo repara raspones , rasguñados y heridas superficiales.
Para que una herida sea tratada el cliente debe acudir hasta 8 días después del indecente, caso contrario la herida se hace negra y Soledad tiene que raspar con liga para luego colocar el encarne.
Los clientes de Soledad son hombres mujeres y niños que vienen por tradición, otros llegan por recomendación o porque ya lo han hecho antes .
Aprendió hace 15 años en la calle Imbabura. Sus clientes son personas que viven por ahí, ya que por el sector siempre hay alguna pelea o los borrachitos que quieren curar sus raspados.
El cobra $1 por aplicación y $6 el tratamiento, que consiste en un gotero con el preparado. El cliente debe lavarse con agua de manzanilla la herida y luego aplicar el gotero.
Edwin Muñoz
Es propietario del negocio Virgen Asunción ubicado en la calle Bolibar e Imbabura. El aprendió de este oficio de sus familiares quienes fueron fabricadores y restauradores de imágenes. Aunque su local tiene 10 años conoce de la restauración hace 40.
El encarne debe ser preparado en el momento de la aplicación para tomar el color de piel del cliente.
Edwin retoca heridas frescas de dos o tres días. Si es una herida que tubo una sutura a penas se retiren los puntos, se debería aplicar el encarne para menor la cicatriz.
Para mejores resultados Edwin recomienda evitar el sol el agua caliente y estar mal genio por que ese estado de ánimo infecta la herida.
La Experiencia
Stefanny Zurita acudió hace 2 años por desesperación, para lidiar con
la cicatrices que adquirió debido a la varicela.
Su dermatóloga le mencionó un tratamiento pero las cicatrices no desaparecerían por completo.
¿Cómo es el procedimiento?
Cuando llegue los restauradores me comentaron que debía ir
cuando aún estaban a flor de piel mis cicatrices de la varicela, es decir
cuando estaban con sangre para que el proceso no sea tan doloroso. Sin embargo
aún tenía solución y era que me volvieran a lastimar las cicatrices para
poderlas tapar.
El señor tomó una tela y empezó a raspar
hasta que estas sangraran, debido a que ya me empezaba a doler y arder mucho, más
porque era mi cara le dije que: si faltaba mucho. El me respondió un poco porque
le estoy haciendo con tela pero se puede hacer con lija de agua.
| ENCARNE: material usado para arreglar imágenes |
Yo le pedí que continúe con la tela, cuando terminó tomó una
botella y puso en la tela una especie de alcohol cuando me puso percibí un olor
raro y pregunte que era, me respondió, tiñer.
Creo que esos fueron momentos impactantes en mi vida, ya que
yo me preguntaba a mí misma en que me metí, deje que continúe porque ya había
pasado lo peor y ya después de eso solo venia cubrir las
cicatrices con el material que usan para arreglar las imágenes.
Terminado eso
me dijo que no me del sol y que si quería tapar más mis cicatrices regresara a
realizar el mismo proceso, lo que considere no muy agradable.

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